Halloween se ha convertido con toda probabilidad en la fiesta más popular del año en todo el mundo. Una fiesta de origen nórdico exportada a Estados Unidos, desde donde cogió toda su popularidad. Cada año son más las personas que deciden celebrar Halloween. Como todos sabemos, esta es una fiesta en la que el objetivo es dar mucho miedo. Quién sabe si quizás lo que consigamos a cambio sea algún caramelo o simplemente pasarlo bien con nuestra gente. En cualquier de los casos, siempre es bueno contar con algunos consejos a la hora de preparar dicho acontecimiento.
Por ello, en Bricolaje10 queremos ofreceros un post donde podréis aprender cómo hacer heridas falsas para Halloween. Os enseñaremos a hacer distintos tipos de heridas, sobre todo para la cara (que es donde más lucen). Pero también para el resto del cuerpo, brazos y piernas incluidos. Esperemos que en este caso, consigáis ser el terror de la fiesta.
Heridas falsas
Las heridas falsas son una estupenda forma de causar miedo a nuestro alrededor. ¿Quién no ha asustado alguna vez a su pobre abuela con una de estas heridas falsas en la cabeza? Ciertamente, el resultado es muy bueno y realista si lo hacemos bien. Con toda seguridad, las heridas falsas son uno de los recursos más socorridos a la hora de preparar algún disfraz con motivos aterradores. Para aquellos de vosotros que penséis que la bola y la cadena y la sábana haciendo el fantasma son lo más ocurrente, os presentamos algunos consejos para dejar a todos con la boca abierta en Halloween.
Para la preparación de heridas falsas contamos con dos opciones. Podemos ir a una tienda especializada en disfraces. Probablemente tengas una a tu alcance donde podrás encontrar toda clase de disfraces y maquillaje. El maquillaje de Halloween es algo especial ya que normalmente incluye algunos compuestos plásticos que recrean la piel. Se trata de conseguir sensaciones tales como carne abierta, colgajos o suturas. Si aún así no tienes ninguna tienda especializada cerca, no temas. En Bricolaje10 te damos las pautas para poder hacer tus propias heridas falsas en casa. Necesitarmeos una base del color de tu piel, pintalabios rojos, “sangre morada”, pegamento, polvos y algún líquido de color sangre. Igualmente, una brocha nos vendrá bien para mezclar los colores. También será bueno contar con color negro para dar sensación de profundidad.
Heridas falsas en la cara
Las heridas falsas en la cara son lo más visible de nuestro disfraz. Existen muchas alternativas como hemos dicho. Las opciones que más suele emplear la gente son aquellas que recrean la carne podrida. Esto se debe a que el disfraz de muerto viviente o zombie es uno de los más solicitados. Con un fondo de maquillaje blanco para dar la sensación de muerto, estas falsas heridas en la cara de muerto viviente suelen ir pintadas de colores oscuras para dar la impresión de que es sangre igualmente podrida o seca. Debemos saber que en función del tipo de herida falsa que queramos recrear, los colores serán otros. Si lo que queremos es dar la sensación de un tejido con gangrena, los tonos verdes y amarillos son la mejor opción.
Por el contrario, si lo que queremos es recrear una herida abierta y recién cosida, es más interesante que la sangre no sea la protagonista, sino más bien el hilo que la rodea.
Heridas falsas fáciles de hacer
Donde vayamos a hacer la herida pondremos pegamento (tipo cola). Con papel higiénico, pondremos poco a poco pedazos de papel hasta cubrir la superficie en la que irá nuestra herida. Con nuestra brocha iremos aplanando suavemente. Según el grosor que queramos, iremos limpiando para quitar el exceso. Después de esto, esperaremos a que el papel se seque. Podemos dejar que seque al aire o emplear un secador de pelo para que seque más rápido. Debe quedar seco, no duro, así que tampoco esperéis demasiado.
A esta pasta seca le aplicaremos la base de maquillaje del mismo tono que nuestra piel. Sobre ella, aplicaremos el polvo para aportar mayor realismo difuminándolo. Aquí es donde debemos emplear el polvo de color morado. Esto creará un efecto parecido al de una herida infectada. Es el momento de hacer la raja principal de nuestra herida. Para ello tendremos mucho cuidado de no traspasar la pasta y herirnos, claro. Aquí podemos incluir cualquier opción: una herida de garra, de puñalada o de impacto, según el gusto. Haremos en consecuencia un boquete según queramos en la pasta.
Al borde de lo que sería nuestra herida lo pintaremos de negro, donde se junta nuestra piel con la pasta. Esto sería el fondo de la herida y por ello el negro le dará profundidad difuminándolo. Sobre el orificio que hemos hecho, echaremos nuestra “sangre”. Es bueno dejar que rebose por fuera de la herida para dar la sensación de sangrado.
Con una pequeña esponja iremos dando toques de sangre en la parte exterior de la pasta, alrededor del surco con sangre de la herida. Ahora tendremos un aspecto parecido al de la carne cruda. ¡Da miedo de verdad!. Como complemento, podremos añadir imperdibles a nuestra herida para dar la impresión de que un cirujano carnicero ha tratado de reconstruirla.
Heridas falsas Halloween
Esperamos que este post os haya ayudado y os haya aportado algunas ideas de cara al próximo Halloween. Todas estas iniciativas son buenas para compartir con toda la familia. Especialmente, Halloween es una fiesta muy divertida para los niños. Se llevarán una alegría si, con los consejos que os hemos dado, les hacemos una herida falsa en la cara o cualquier parte del cuerpo. Se quedarán con la boca abierta y serán el centro de atención de mayores y niños.
Una manera de hacer que nuestras heridas falsas resalten más es colocándolas en sitios de habitual movimiento. Por ejemplo, el cuello es un sitio muy bueno. Esto es porque con el movimiento de nuestros propios músculos, la herida irá cambiando de una posición a otra y ayudará con ello a darle mayor realismo a todo nuestro trabajo. Parecerá literalmente que la carne se está abriendo y que el colgajo que rodea a la herida se mueve con nosotros.
También te puede interesar:
